30 de noviembre de 2007

Pere Navarro, el cazador cazado

Que los programas de investigación están de moda no podemos negarlo. Que tengan su utilidad... ya es otro asunto. Para el director General de Tráfico, Pere Navarro, el servicio que estos espacios televisivos aportan a la sociedad no será muy de su agrado. Al menos, «Cazados», de Antena 3.

El seguimiento al coche que transporta a Navarro, conducido por su chófer (él carece de permiso de conducir), es digno de ver... aunque no de imitar. Un recorrido que, de conducir el director de Tráfico, le hubiera costado seis puntos en el carné y más de mil euros.

Un ejemplo más. Continúan proliferando aquéllos (Gore's style) que piensan que predicar con el ejemplo no va mucho con ellos.

29 de noviembre de 2007

La suerte le vuelve a sonreír

El alcalde de Alicante, Luis Díaz Alperi, está hoy de enhorabuena. La Sala de lo Civil y Penal del Tribunal Superior de Justicia de la Comunidad Valenciana ha decretado el sobreseimiento libre de la causa abierta contra él por el caso de los aparcamientos.

La resolución se refiere a la denuncia formulada por la Fiscalía Anticorrupción de Alicante contra el alcalde, la concejal Sonia Castedo y el ex edil Luis Concepción por cinco supuestos delitos (prevaricación administrativa, tráfico de influencias, falsedad, malversación de caudales públicos y apropiación indebida) en la adjudicación de tres aparcamientos subterráneos a al empresa Ortiz e Hijos. ¡A quién si no!, añado.

El tribunal ha considerado que los hechos «no son constitutivos de los delitos cuya comisión se imputaba en la denuncia interpuesta por el Ministerio Fiscal y en las querellas».

Además, hace apenas unos días la magistrada que investiga el caso Mercalicante admitió a trámite la petición del cierre del proceso penal abierto contra el alcalde.

¿Demasiadas buenas noticias? ¿Seguirá la Fiscalía Anticorrupción de Alicante su particular batalla legal contra Alperi? ¿Pondrá el alcalde sus barbas a remojar… tras la reciente detención de su homólogo en el Ayuntamiento de Totana?

Muchas preguntas. ¿Las respuestas? Con el tiempo, no se apresuren. Estamos hablando de la Justicia, recuerden.

28 de noviembre de 2007

La ética periodística a debate


La ética a debate una vez más, y no será la última...

Y ya tenemos nuevo lío. Cada día resulta más inviable que en España cualquier hecho transcurra sin polémica.

El juicio del 11-M se ha desarrollado dentro de unos parámetros de aparente normalidad. El juez Javier Gómez Bermúdez, por su parte, consiguió durante el proceso el apoyo y reconocimiento de, prácticamente, todos los sectores por su hábil proceder a la hora de conducir el juicio. Hasta aquí todo idílico. Pero claro, alguna circunstancia debía alterar este remanso de paz.

Aquí es cuando aparece el libro «La soledad del juzgador» y la figura de su autora, Elisa Beni, periodista y mujer del magistrado que presidió el tribunal que juzgó el 11-M.

Beni, además de compartir alcoba con Bermúdez, ejerce como responsable de comunicación del Tribunal Superior de Justicia de Madrid. Casualidad o no, tampoco es el asunto que nos ocupa.

La noticia de hoy es que el Consejo General del Poder Judicial (órgano que ya genera polémica por sí solo) ha abierto una información previa para investigar si la publicación del libro ha podido incurrir en violación de la normativa.

El libro ha estado rodeado envuelto en polémica desde antes de su presentación. Compañeros de Bermúdez le acusaron de «deslealtad», el presidente de la Audiencia Nacional pidió a Bermúdez explicaciones, Pilar Manjón denunció que el libro pone en peligro su vida… Éstos son algunos de los muchos ejemplos.

El conflicto se intensifica al conocerse que Elisa Beni, autora del polémico libro, es la administradora única de su propia editorial: Uzabal Comunicación. Y, que según el artículo 11 de la Ley 53/1984, que regula las incompatibilidades del personal al servicio de las Administraciones Públicas, los funcionarios tiene prohibido ejercer actividades privadas, incluidas las de carácter profesional, que se relacionen directamente con las que desarrolle el departamento, organismo o entidad donde estuviera destinado.

Habrá o no violado la normativa, puede superar con más o menos suerte todos los controles legales, no lo discuto. Pero, ¿es ético utilizar información personal para publicar un libro a pocas semanas de dictarse una sentencia tan relevante como ésta? ¿Debe un periodista utilizar todas sus armas a la hora de conseguir una información?
Elisa Beni, creo, ha pecado de afán de protagonismo y de no saber calibrar a tiempo, o sí y es lo que buscaba, la repercusión de su actuación. No me parece ético, siendo la mujer del magistrado jefe, escribir un libro desvelando datos no conocidos hasta la fecha y aprovechar el impacto mediático de la sentencia para ver cómo aumenta exponencialmente su capital. Será legal, pero no moral.

27 de noviembre de 2007

La cumbre de la foto

O eso dicen los expertos. Aunque los objetivos de Annapolis son, a priori, algo más ambiciosos.

Tras la reunión de hoy, el primer ministro de Israel, Ehud Olmert, y el presidente de la Autoridad Nacional Palestina, Mahmud Abbas, han acordado iniciar las negociaciones que lleven a un acuerdo de paz antes de 2009.

El presidente George Bush, organizador de la reunión, ha informado que la declaración acordada en Annapolis es el inicio para buscar la paz que ambos desean y que es el momento oportuno para evitar que los terroristas continúen con sus ataques en la región.

Reuniones bimensuales, ininterrumpidas y con voluntad de alcanzar un acuerdo de paz permanente en la zona… Mucha palabrería… A ver qué llega a cumplirse. ¡Qué bonitas palabras! ¿Hechos? No más de los comunes.

Estados Unidos se ha comprometido a ser mediador. Pero mediador, ¿de qué? ¿Hay algún país más partidista en el conflicto de Oriente Próximo? No. ¿Cómo se va a fiar Palestina de ellos? ¿Por qué? ¿Deben?

Para llegar a una solución, permanente, entre estas dos regiones, ambas deben ceder y no parece que lo vayan a hacer, de hecho. La historia da la razón a cualquiera que mantenga este pensamiento (negativo).

Bill Clinton ya intentó, durante el último tramo de su mandato, canalizar las conversaciones entre israelíes y palestinos y facilitar el acuerdo. Camp David fue un fracaso. De esa ronda de reuniones, muchas conclusiones se extrajeron. Realidades, ninguna. Todos sabemos cuál es la situación actual entre Israel y Palestina. Seis años después de este encuentro, Jerusalén continúa siendo irrenunciable para ambas partes; los asentamientos en Cisjordania y Gaza no ven solución al problema; la resolución 181 de la ONU sigue sin cumplirse; y las fronteras… ¡Cuánto mal crean las fronteras!

Bush ha querido dejar su nombre marcado en el futuro de Oriente Próximo… Seguramente se quede en una intención más, de las muchas que ha habido durante las últimas seis décadas. ¡Que ya son años, ya!

Para que estas reuniones tengan visos reales de éxito deben contar con el apoyo de la sociedad. Pero, en este caso, ¿apuestan por la paz verdadera israelíes y palestinos? ¿Todos o una parte? ¿Son mayoría los que quieren ver el final del conflicto? ¿Los que encabezan las manifestaciones representan a su población? Demasiadas cuestiones en el aire.

26 de noviembre de 2007

Solbes acepta la invitación

La propuesta se produjo ayer, domingo, durante el acto de proclamación de Rodríguez Zapatero como candidato para las próximas elecciones por el PSOE. El actual presidente invitó a Solbes a «seguir en esto», en la política.

Horas después, no sabemos a qué precio, pero sí sabemos que ha aceptado, que estará presente en las inminentes listas electorales. Al contrario de lo que sucedió en los pasados comicios (marzo de 2004), Pedro Solbes concurrirá como número dos por Madrid. En esta ocasión no se esconde. No se refugia en una posible victoria o derrota de su partido. Da la cara y acepta las posibles consecuencias de los designios del pueblo. A día de hoy, con cierto ventajismo, todo sea dicho.

Esta decisión afecta a varios asuntos. El principal es que Zapatero no pierde a uno de sus hombres fuertes, a una carta de su póker. Aquellas personas que en realidad soportan el peso de la gobernabilidad de un país. De la Vega, Solbes, Rubalcaba, Caldera (como amiguito)… y pocos más, no nos engañemos.

La declaración de Solbes, durante una intervención en el Foro ABC, implica que el PSOE no presentará «lista cremallera», rompe el esquema de representación paritaria por sexos. Algo, pienso, secundario. Pero que no lo debería ser para los que promulgaron esta ley.

Además, Alicante también está de enhorabuena. Tras la inclusión en las listas de Bernat Soria (de «La Terreta» de corazón), otro alicantino de pro representará a nuestra provincia en el Congreso. No es algo baladí.

Solbes, un político respetado por todos que, durante sus casi cuarenta años en política, ha demostrado saber consensuar ideales con realidades. El titular de Economía seguirá en la política activa, y ésta es una noticia para congratularnos. Días atrás, Manuel Marín anunció que dejaba la política activa. Sus desavenencias con la cúpula socialista le han impulsado a apartarse de donde los focos más alumbran. Ahora se va a dedicar a investigar sobre el cambio climático. Qué pena, qué perdida.

Dos caras, distintos destinos. Dos políticos que han sufrido durante los últimos cuatro años tensiones con Zapatero, pero que han respondido de forma distinta. Para pocos buenos que hay… y uno se marcha. ¡Eh! Que aún nos queda Maleni, Narbona, Moratinos… Éstos no son tan eficaces, pero al menos nos facilitan la vida, nos hacen reír a diario. Que, oye, en estos tiempos que corren -aunque cada día menos- es misión harto complicada. No les infravaloremos… como cómicos. Claro.

25 de noviembre de 2007

La presa, a tiro


El 25 de noviembre fue declarado Día Internacional contra la Violencia de Género en el I Encuentro Feminista de Latinoamérica y del Caribe celebrado en Bogotá (Colombia) en julio de 1981.

Hoy, por tanto, es un día de reflexión y para actuar. De reflexión de todos y de actuación, también. No seamos necios.

Tenemos reciente un caso con gran trascendencia mediática, la muerte de Svetlana, aquí, en Alicante. Este caso, por ejemplo, podría servir para basar una reflexión con su consiguiente opinión, pero mejor voy a darle «voz» a alguien que lo hace mucho mejor.

El «Análisis» de hoy en INFORMACIÓN merece la pena leerlo. Y después, meditar sobre el qué nos quiere transmitir Juan R. Gil con él, si tiene razón (para mí, toda) y de qué medios disponemos para hacer frente a esta lacra de nuestra sociedad.



El Día por la Eliminación de la Violencia contra las Mujeres, que hoy se celebra, viene marcado por el caso de la joven rusa que hace una semana fue degollada en el portal de su vivienda. Un caso que pone en evidencia tanto los fallos del sistema como la hipocresía de nuestra sociedad. Porque Svetlana , que tan sólo tenía treinta años, había hecho todo lo posible para librarse de la muerte. Y no es que no la dejaran, es que no la dejamos, que no es lo mismo. Svetlana se había escondido de su acosador buscando un piso refugio, le había denunciado, había llegado a colarse un día en un cuartel de la Guardia Civil en demanda de auxilio, estaba tramitando el regreso a su país y sabía, a ciencia cierta, que la iban a matar. Nada le sirvió. Al maltratador, hoy en prisión como acusado de su asesinato, le entregaron la orden de alejamiento del juzgado cuando ya se encontraba entre rejas y Svetlana en la morgue. El tribunal no había podido notificar dicha orden alegando que no lo encontraba. Qué ironía. No sólo que la orden de alejamiento se la dieran cuando ya lo tenían preso, sino que lo que el juzgado no fue capaz de hacer lo hiciera un programa de telebasura que se emite en horario infantil. Un bodrio al que, para mayor desvergüenza, llevaron a Svetlana sin decirle que allí se iba a encontrar con el hombre al que tanto temía, sino permitiéndole que creyera que era con su madre con quien se iba a ver. Dice hoy, en una entrevista en este periódico, el nuevo comisario provincial, que sólo mueren las mujeres que no llaman a la Policía. No es verdad: la Policía no puede alardear, en estos momentos, de proporcionar una protección realmente efectiva. No tiene medios suficientes para ello. Y, por su lado, la burocracia no tiene, ni sentido, ni corazón. Conseguir un pasaporte resulta, a veces, cuestión de meses. Y las notificaciones de los juzgados se entregan hoy en día como en el siglo XIX, y no sólo el sistema no se cambia (ni siquiera en un caso de violencia, donde habría que poner a la Policía de inmediato a buscar al condenado con esa orden) sino que el Consell le recorta los escasos medios de los que ya dispone ese servicio. Han dicho también en distintos momentos y en diferentes casos, tanto la subdelegada del Gobierno, Encarna Llinares , como la delegada contra la Violencia de Género, Antonia Graells , que las mujeres maltratadas tienen que poner de su parte para no acabar muertas. Y eso también es una falacia, un mirar para otro lado, porque la maltratada generalmente es una persona con demasiado terror y demasiado minada en su voluntad como para poder, de un día para otro, recuperar la conciencia de su dignidad y, con ella, el timón de su vida. Svetlana hizo mucho por escapar a su suerte. Pero entre todos le pusimos al asesino la presa a tiro.


24 de noviembre de 2007

Perla III: Periodismo, legítima profesión

Francisco Esquivel firmaba el 9 de febrero en INFORMACIÓN una columna que ahora, de nuevo, es actualidad. En aquel momento el asunto «estrella» era el reciente fallecimiento de Erika Ortiz, hermana de la Princesa Letizia. Ahora la polémica envuelve al «Diario de Patricia» y el supuesto servicio que hace por la sociedad. Ninguno, claro está.

Pero, nueve meses después, el fondo de la (siguiente) opinión es el mismo: ¿Debe el periodismo detener todo lo que se genera a su alrededor y que carece de la verdadera naturaleza de esta profesión? La respuesta es evidente, ¿no? Pues depende de todos (nosotros).

-.LAS DESVIACIONES.-

Siempre me ha gustado esta profesión sobre todas las historias pero, de un tiempo a esta parte, se ofrece un determinado tipo de espectáculo en nombre del periodismo que te dan ganas de dedicarte a cualquier otra cosa, incluida la política. Con eso lo digo todo. Afortunadamente no soy el único que se estremece. Bastantes nos temíamos lo que se desplegaría en esos platós para darle vueltas y más vueltas a un suceso tremendo del que además nadie maneja apenas información como es lógico. Pero eso es lo de menos. La gente se bebe lo que le echen y los medios se lo inyectan. Me gustaría decirle a la gente joven que no siempre fue así. Tuve la suerte de iniciarme simultáneamente en las redacciones y en la facultad en el año que cayó Nixon. El objetivo de profesionales que ya estaban y de los que llegábamos era el de ser capaz de contarle a nuestros lectores lo que pasaba a su alrededor y destapar desatinos, desviaciones y abusos. Hoy es que abusa todo quisque sin distinción de procedencia y, el que no lo hace, parece que es un timorato anacrónico. Pues que siga el número. Así, mientras la «pía» Paloma Gómez Borrero acude al «tomate» a certificar que fue un suicidio, la republicana Rahola le dice perrerías a Peñafiel y lo acusa de hacer negocio con el asunto como si ella estuviera ahí, frente a los focos, porque sus convicciones se lo demandan. El problema de esta profesión incumbe a otras batallas. No sólo en esta vertiente llamémosle más frívola se traspasa la raya. Buenafuente acaba de renunciar a un premio porque se lo han concedido también a Losantos y, en su criterio, «así tratan de ser salomónicos y decir que todo vale, y poco a poco se va pudriendo el periodismo». No siempre fue así ni tiene por qué seguir siéndolo. Basta con que nos dediquemos a lo que tenemos que dedicarnos. Depende, pues, de nosotros y de ustedes.



22 de noviembre de 2007

Se lo debían


La Academia de la Televisión celebró ayer la novena edición de sus Premios Anuales. El ganador indiscutible, dicen, fue la serie de TVE «Cuéntame», que se llevó los galardones a Mejor Ficción, Mejor Actriz, Mejor Director, Mejor Guión y Mejor Maquillaje.

Recalco «dicen» porque la gran protagonista debió ser Rosa María Calaf. La periodista catalana que recibió el Premio «Toda una Vida». Bien merecido, todo sea dicho.

Este galardón, en ediciones anteriores, fue para Jesús Hermida, Miguel de la Quadra Salcedo, Antonio Mercero, Chicho Ibáñez Serrador, Matías Prats Sr., entre otros. A esta lista de admirables profesionales ya pertenece Calaf. Lo hacía de facto (de hecho), ahora también de iure (de derecho).

Durante muchos años, ha sido los ojos de los españoles en lugares tan dispares como Moscú, Buenos Aires, Nueva York, Roma, Hong Kong... En la actualidad, es la corresponsal de TVE en Asia-Pacífico. La más veterana del ente público. Un lujo para el periodismo; un lujo para RTVE, que casi desaprovechó. El ERE (Expediente de Regulación de Empleo), cual espada de Damocles, estuvo cerca de precipitar su retirada. Sólo cerca, por suerte. La jubilación puede, y debe, esperar.

Rosa María Calaf estuvo presente en las II Jornadas de Periodismo de la UMH, y así pudimos disfrutar con su presencia. Una mujer envidiable. Una envidia es, simplemente, escucharla. Habla y habla, y no se cansa. La escuchas, y quieres más. Narra con pasión cada una de las experiencias que ha vivido durante estos años como corresponsal. Ama el Periodismo y ese sentimiento lo transmite, sin ningún esfuerzo.

El pasado abril, algunos tuvimos el pasado año el placer de compartir con ella una agradable conversación. Una tertulia más que gratificante. Una experiencia inolvidable.

Desde aquí, un modesto homenaje a una de las grandes que aún resisten. Disfrutemos de su presencia. Y cuanto más tiempo, mejor.

20 de noviembre de 2007

¿Todo vale?


Bilal Hussein Zaidon es un reputado reportero gráfico de origen iraquí de la agencia AP. Su calidad le llevó en 2005, junto a un grupo de compañeros, a llevarse el prestigioso Pulitzer. Es decir, un grande de la fotografía.

Sin embargo, ahora es actualidad por un asunto distinto. EEUU le acusa de estar conectado con la insurgencia en Irak. El Pentágono asegura que tiene «pruebas convincentes e irrefutables» que apoyan esta imputación.

Bilal Hussein Zaidon fue detenido en abril de 2006 por soldados norteamericanos. Aún se desconocen cuáles son las acusaciones que caerán sobre él; sin embargo, las pruebas que se han presentado ante el Tribunal Central Iraquí son propaganda rebelde y parte de una bomba, halladas en la entrada de su casa.

A las autoridades estadounidenses siempre les extrañó que Hussein Zaidon llegara al lugar el primero. Daba igual la ubicación del atentado, él estaba allí rápidamente.

Por su parte, la asociación gala Reporteros Sin Fronteras ha solicitado si inmediata liberación. Alega que «los derechos de Hussein estén siendo ignorados e incluso violados».

Aquí las preguntas: ¿Todo vale por una buena imagen? ¿Es ético entablar contactos con unos asesinos? ¿Cualquier fuente de información es lícita? ¿Es la guerra un territorio tan inhóspito en el que las condiciones validan este tipo de actuaciones?

Mi opinión: No, claro que no. Nadie puede recibir información de este calibre y utilizarla de manera tan egoísta. Las víctimas no son más que buenos actores para sus imágenes. Lamentable. Si con un juicio justo se demuestra que este fotógrafo estaba en consonancia con la insurgencia iraquí debería ser condenado por ello. Pienso que la libertad (cualquiera, también la de prensa, la de expresión…) debe tener unos límites. Y, en este caso, la frontera habría sido superada, y de largo.


PS.: La imagen fue tomada por Hussein Zaidon y forma parte del reportaje de AP, galardonado con el Pulitzer en 2005.

18 de noviembre de 2007

Elche, ¿capital de qué?


El Análisis que (casi) todos los domingos publica el INFORMACIÓN en su página dos y que firma su director versa hoy sobre la modernización de Elche. El comienzo es fuerte, el titular es cuanto menos provocador: «Alicante, capital Elche». De ahí mi inicio. Durante sus más de 1.400 palabras, el artículo defiende una tesis, respetable pero que no comparto: Elche sale de su crisis renovada, mientras que Alicante nunca resuelve las suyas.

Pero, para mí, lo más curioso de todo, y ya no me refiero sólo al artículo antes mencionado, es que Alicante debe envidiar, ahora, a Elche por su Corte Inglés. O ando yo muy equivocada, o aquí disfrutamos de ese centro comercial hace años. Y a falta de uno, dos. El otro día (tras la inauguración oficial del centro de Elche) leí una columna donde se criticaba el crecimiento de Alicante, comparándolo claro con el admirable de Elche… Eso sí, los argumentos que defendían esa opinión eran simplemente falsos. Se esgrimía que el Corte de Inglés de Elche está ubicado en una zona alejada del centro de Elche. Y sí, puede ser cierto. Pero, cuando se abrió en Alicante, ¿dónde estaba el citado «centro» alicantino, dónde estaban los comercios? No precisamente en la avenida Maisonnave. Yo era pequeña, pero sé, por gente que me supera en edad y en conocimientos, que esta zona no tenía ninguna vida comercial. El centro neurálgico estaba en Canalejas, la Rambla… Una zona, a día de hoy, abandonada. Cierto. Aunque si se compara (ahora que está tan de moda) con el de Valencia, Barcelona o Madrid… poco se diferencia. Zonas deprimidas ocupadas por los inmigrantes.

Pienso que Elche tiene aspectos destacables, eso sí, la mayoría históricos. Su MAHE dicen que es digno de visita, pero no menos que el MARQ. Pero claro, el carácter alicantino es muy dado a despreciar todo lo que tenemos. El Puerto es la envidia entre los turistas que nos visitan. La nueva zona comercial y residencial del PAU 5 (el conocido Golf de San Juan) es más que apetecible...

Para terminar, y como mera conclusión, ¿una ciudad se debe medir por su Corte Inglés? Si la respuesta es afirmativa, mal estamos.

17 de noviembre de 2007

Perla II: Jugar con las palabras

Una semana más, tal como prometí, voy a volcar en el blog uno de los escritos más divertidos de los últimos años. Corresponde, cómo no, a Juan José Millás y se titula «La cosa». Este maravilloso artículo-cuento, a través del lenguaje y de jugar con él, parte de una caja de zapatos y arriba hasta una cosa, cuasi inservible.

¡Disfrutad!

De pequeño tuve una caja de zapatos que llegó a ser mi juguete preferido, entre otras cosas porque no tenía otro. Pero envejeció más deprisa que los zapatos que había llevado dentro, de manera que a mi caja se le cayó un día la primera a y se quedó en una cja, que así, a primera vista, parece un juguete yugoslavo. Busqué entre las herramientas de mi padre una a de repuesto, pero no había ninguna y tuve que sustituirla por una o. De este modo, sin transición, tuve que olvidar la caja para hacerme cargo de una coja, lo que es tan duro como pasar directamente de la niñez a los asuntos. Jugué mucho con aquella coja, todavía la recuerdo, pero se fue haciendo mayor también y un día se le cayó la jota. Hay quien piensa que las vocales se estropean antes que las consonantes, pero yo creo que vienen a durar más o menos lo mismo. El caso es que tampoco encontré entre los tornillos de mi padre una jota en buen uso, así que la sustituí por una pe que estaba prácticamente sin estrenar. La coloqué en el lugar de la jota y me salió una copa estupenda, con la que he bebido de todo hasta ayer mismo, que se me cayó al suelo y se rompió. A decir verdad, se rompió justamente por la pe, y como es muy antigua no he encontrado en ninguna ferretería una igual. Ayer fui a casa de mis padres, y después de mucho rebuscar en el trastero di con una ese que no desentona con el conjunto. O sea, que ahora tengo una cosa, pero no sé qué hacer con ella. La caja, lo coja y la copa eran muy útiles para guardar secretos, jugar o emborracharse. Pero la cosa me da miedo; además, la escondí en el bolsillo interior de la chaqueta, de manera que desde ayer tengo una cosa aquí, en el pecho, que me llena de angustia. Lo peor de todo es que, como no sé qué es, tampoco sé cómo se rompe. Qué vida, ¿no?

Y ya sabéis, la palabra «cosa» cuanto menos la usemos, mucho mejor.

16 de noviembre de 2007

Y encima de celebración

Así es como está «Yo, periodista», el servicio que el diario EL PAÍS ofrece a los usuarios para que envíen sus propias noticias. Los modernos le llaman periodismo ciudadano. Como decía, están de celebración porque les han concedido el premio al «Mejor proyecto interactivo emergente en Internet», que otorga la IAB (Interactive Advertising Bureau).

Pues nada, habrá que felicitarles. Es cierto que desarrollan un servicio impagable. Complicado es que la sociedad pueda devolver a esta plataforma la gran labor que realizan por el futuro. Pero no por el futuro del Periodismo, precisamente.

Llevo meses, desde que el Grupo PRISA creó este espacio, indignada. Y qué mejor que esta ocasión para demostrar mi estado anímico. Puedo admitir, que no compartir, la oportunidad que se le da al lector. Cualquier persona puede contar su experiencia, sus conocimientos acerca de cualquier asunto. Hasta aquí, vale. Pero, ¿cómo un medio del prestigio de EL PAÍS puede tener la desfachatez de llamar a esta sección, creada por y para los lectores, «YO, PERIODISTA»? ¿Cómo osan a calificar de «periodista» a cualquier persona que se atreve a narrar un hecho del que es protagonista, o a veces ni eso?

No lo entiendo. Hay algo que se me escapa de las manos. La colaboración ciudadana tiene sentido en algunas ocasiones, contadas todo sea dicho. Pero que unos periodistas (o al menos profesionales del periodismo) se tomen a la ligera su trabajo y ofrezcan ese nombre (periodista) a cualquiera que se atreva a escribir (con o sin ética, con o sin rigor, con o sin corrección, ¡qué mas da!), me resulta desesperanzador.

Y no, esto no es ninguna crítica al llamado «periodista ciudadano», del que disiento. Esto es una crítica, con grandes dosis de coraje, al diario EL PAÍS. Tan ético para algunos asuntos y tan permisivo con otros. Con otros que, además, chocan tan frontalmente.

Lástima, y felicidades.

15 de noviembre de 2007

Estamos de enhorabuena


Por fin una radio generalista ha tenido la osadía de colocar a una mujer al frente de un programa de actualidad política. Y no, no voy a escribir el típico discurso feminista. Descuiden.

Por fin un medio de comunicación, la SER para ser más exactos, ha obviado el carné de identidad a la hora de elegir al director de un programa referente. Àngels Barceló es la afortunada.

Hasta el día de hoy, no había ninguna mujer a lo mandos de ningún formato referente. Hasta hoy. Si repasamos las parrillas de los principales medios radiofónicos vemos nombres como Carles Francino, José Antonio Marcos y Javier Casal (en la SER); Carlos Herrera y Carlos Alsina (Onda Cero); Federico Jiménez Losantos, Ignacio Villa y César Vidal (COPE); Luis del Olmo y Félix Madero (Punto Radio)… Todos hombres y todos con puestos de especial relevancia en su empresa.

Hasta hoy, como decía. La dirección de la Cadena SER, con valentía, ha apostado por la catalana para sustituir, definitivamente, al desaparecido Carlos Llamas. No es una labor sencilla. «Hora 25» es el programa de Llamas. Sé que no lo creó él, pero también sé que lo convirtió en suyo. Àngels tiene doble hándicap: ser mujer y ocupar el puesto de un maestro de las ondas.

Este nombramiento lo podremos sentir y valorar a partir de enero. Estaremos alerta.



Abierto por obligación


EL PAÍS pone a partir de hoy a disposición de todos, GRATIS, la hemeroteca del diario. Por fin, la cabecera del Grupo PRISA mira hacia el futuro y estima oportuno, necesario, abrir sus archivos a los internautas. ¡¡Ya era hora!!

No hace muchos años, con la revolución cibernética, EL PAÍS decidió cerrar el acceso a sus servicios (permitido sólo a los suscriptores), los que no pagaban se debían conformar con pequeñas dosis, insuficientes. Esa decisión le costó perder el liderato que ostentaba y conserva su edición impresa. EL MUNDO se escapó. Sin embargo, poco a poco EL PAÍS ha recapacitado -dicen que viendo las insuficientes visitas a la página- y ha optado por liberalizar el servicio, todos los servicios, o casi.

Así que, de hoy en adelante, podemos disfrutar de una inagotable fuente de información, de recursos que nos vendrán muy bien. Más de un millón de piezas, más de treinta años de historia.

¡¡Estamos de celebración!!

14 de noviembre de 2007

La enésima, en la frente


La Universidad nos ha vuelto a brindar una sorpresa, poco atractiva todo sea dicho. Pero como no es la primera vez –ni la última, por supuesto– tampoco afectará mucho, lo justo. Ya tenemos costra, dicen.

Para elaborar una práctica de la asignatura de «Lenguaje y técnicas de Periodismo escrito» el próximo lunes, 19 de noviembre, el alcalde de Elche, Alejandro Soler, venía hasta la clase de 3.º de Periodismo para enfrentarse a nuestras preguntas. Todo un reto para ambas partes. Un personaje de la importancia política del presidente de la Corporación Local y los alumnos de Periodismo, frente a frente. Pero no, el asunto brillaba demasiado. Estamos en la UMH, recordemos. Al final, nos tenemos que conformar con el coordinador de Elche Acoge, todo un placer.

«Una más para la lista». Esa cantinela tan manida después de tres años en Elche. La nómina va creciendo, y sin cesar que tiene su mérito. ¿La penúltima? A falta de trabajos, de prácticas, de obligaciones laborales y demás, para asistir a un coloquio con Pepa Bueno, hay que realizar un informe de 800 palabras. Ni más ni menos. Di que sí, como el tiempo lo tenemos por castigo, aprovechémoslo, ¿no? Pues no. Lamentándolo mucho, me tocará dejar que la ocasión pase. Ya tuve el placer de acudir a una ponencia que ofreció el pasado año en Valencia, durante el I Congreso Internacional de Periodismo.

En fin. Habrá que continuar con la búsqueda. Seguro que el próximo año, en un ambiente distinto, todo cambia, y para peor no será, seguro.

13 de noviembre de 2007

La aberración del término «justicia»


Esta mañana se ha hecho público el esperado fallo, y nunca mejor dicho. El magistrado Vázquez Honrubia ha impuesto sendas multas de 3.000 euros a Guillermo Torres y Manel Fontdevila, autores de la archiconocida caricatura de los Príncipes.

El juez ha considerado que tanto el dibujo como el texto de la viñeta son «objetivamente injuriosos». Aún así ha rebajado en un 50% la multa que solicitaba la Fiscalía.

En realidad no sé qué es más lamentable: el resultado de la sentencia o la solicitud del fiscal.

La libertad de expresión, claro está, debe tener unos límites. Pero ¿la portada de El Jueves los sobrepasaba? Para unas cosas tanto y para otras tan poco… En fin.

La pasada semana, en la Universidad, nos facilitaron un Informe de Reporteros Sin Fronteras, donde la organización francesa denunciaba los casos de falta de libertad en distintos países de Europa y la extinta URSS. Ejemplos flagrantes para la profesión periodística, lugares donde es imposible informar acerca de las intenciones de los gobiernos, de sus actuaciones.

Y me pregunto, ¿no es peor nuestro caso? La familia real debe exigir respeto, pero no más que cualquier otro cargo representativo del poder español. Incluso, no más que cualquier ciudadano (y en este instante, con los programas de sociedad, los jueces no darían abasto).

Pero yendo más allá, la supuesta humillación de esa viñeta, ¿dónde estaba? ¿En la imagen? Pienso que no ¿Nos es peor, más ofensivo, el texto que la acompaña? Está claro que ese mismas líneas (donde se les tachaba de vagos e improductivos) sin el correspondiente dibujo no hubiera tenido ni un ápice de la trascendencia que tuvo.

Por otro lado, aunque no menos importante, la actuación de la Fiscalía. ¿Cuál era su finalidad? ¿Pretendía defender a la institución o incrementar la polémica? Quiero pensar que la respuesta correcta es la primera. Quiero, aunque eso no significa que lo consiga. Entonces que se dediquen a asuntos más relevantes y que vulneran mucho más la libertad, aunque no sea la de prensa.

¡Esto es España! Demócratas nos llaman.


P.S.: ¡Ah! Y ya sabéis. Para conseguir dinero, a tener hijos. A nosotros las injurias, ni de refilón. Dicen que no tenemos ni fama ni estimación. Ellos tampoco, que es lo peor.

12 de noviembre de 2007

Repaso por la Transición


La sede de la UA en Alicante ha acogido esta tarde una de las conferencias enclavas en «El año que cambió (casi) todo». Hoy era el turno para el periodista alicantino José Reig, que en la actualidad es profesor en el CEU de Valencia.

Bajo el título «La transición en los medios de comunicación», el protagonista ha intentado repasar la importancia, relativa, del periodismo durante esta época histórica.

¿Fue la prensa un Parlamento de Papel? ¿El motor de la Transición? O, ¿se limitó a dejarse arrastrar por la corriente generada en la sociedad y amplificar, hacerse eco, de las opiniones que imperaban entre los ciudadanos? Preguntas a las que ha intentado responder durante casi una hora de charla.

La conclusión a la que ha llegado José Reig, muy personal como ha dejado claro, es que los medios de comunicación se pusieron medallas que no le correspondían, que no se habían ganado en la batalla diaria, en las trincheras de esa convulsa etapa política, social...

Al llegar a este punto y enlazándolo con la actualidad, he estado pensando y lo hago ahora -en voz alta- sobre cómo actúan los medios de comunicación y, sobre todo, cómo es la imagen que pretenden proyectar ante la sociedad, ante su sociedad.

Al actual periodista, ¿le gusta ser excesivamente centro de la atención?
¿Ha dejado de ser el periodista un mero transmisor de información?
¿Conviene perder dosis de credibilidad a cambio de reconocimiento público?
¿Es preferible ser admirado -con la parte efímera que conlleva- por la audiencia o ser respetado por la profesión?
El futuro comunicador, el actual universitario, ¿ansía convertirse en «periodista estrella» o, por el contrario, aspira a desarrollar una trayectoria como la de cualquier profesional de esa talla?
¿Puede ser alguno de estos motivos la raiz de la presunta crisis que atraviesa el Periodismo?

A modo de cierre, una frase de José Reig. «Durante la Transición, lo que pasaba no se podía contar, mientras que lo que se podía contar, no sucedía».

¡¡Vivimos ahora un momento excitante!! Aprovechemos todas las oportunidades que tenemos: tanto en la cantidad de acontecimientos, como en la posibilidad para aportarles calidad a todos ellos.

11 de noviembre de 2007

Gumersindo, de nuevo


Gumersindo Lafuente (izquierda) se convirtió en un personaje público, conocido y reconocido cuando sus desavenencias editoriales con Pedro J. Ramírez provocaron su salida de elmundo.es. Prefirió mantener intacto su orgullo y no convertirse en un simple altavoz de las ideas de P.J.

El periodista madrileño, tras su salida de la versión cibernética del diario de Unedisa, comenzó a gestar un nuevo espacio digital. Y ahora, lanza su nuevo producto: soitu.es


Gumersindo convirtió a elmundo.es en el referente de los medios en Internet. Un espacio objetivo, abierto y ausente de radicales políticos. Con su nuevo portal quiere seguir evolucionando el periodismo digital y todas sus ramificaciones.


Un blog con el making off del comienzo del diario se presentó hace unos días. Para finales de este años, se prevé la inauguración oficial. Esperaremos. Seguro que el proyecto resultante es digno de ver.


http://www.soitu.es/ <-- Aquí el futuro, dicen, del periodismo. Sin papel, electrónico.


PD.: En la foto, a la izquierda, Gumersindo Lafuente; a la derecha, Jean François Fogel, responsable de Le Monde en su versión digital.

10 de noviembre de 2007

Con un par...


«¿Por qué no te callas?». Así, sin más miramientos, sin excesiva diplomacia, pero con sobrada razón se ha dirigido el Rey Juan Carlos al presidente de Venezuela, Hugo Chávez. El escenario, la XVII Cumbre Iberoamericana.

Por fin alguien ha tenido el atrevimiento de espetarle al demócrata bolivariano lo que muchos piensan, pero que, por miedo al «qué dirán», todos se guardan, o se guardaban hasta hoy.

¿El motivo? Es lo de menos. Ahora los políticos utilizarán esta reacción para su propio beneficio. Unos dirán que actuó en defensa del ex presidente Aznar (al que Chávez había calificado en diversas ocasiones de «fascista»). Otros defenderán la figura del Rey y su autoridad en marcos internacionales. Pero todos, creo, valorarán la defensa de la democracia hecha por un demócrata sobre un dictador.

Todo dicho.

Perla I: La música como placer

Cada fin de semana dejaré por este espacio alguna «perla» histórica. No tiene por qué llevar el peso de la fama. Más bien al contrario. Pequeños regalos que durante años nos ha hecho el periodismo o la literatura periodística...

Para comenzar, los efectos colaterales de la música. El 30 de marzo de 2002 en INFORMACIÓN, Francisco Esquivel lo relata con su peculiar sentido del humor, sorna y gracia andaluza. ¡¡Disfruten!!

Llega un momento en que, de
oír las mismas noticias –y
normalmente malas– en un
informativo tras otro, acaba uno
hasta el gorro, ¿verdad? Pues, si
esto les ocurre a ustedes, imagínense
a los que como nosotros
nos dedicamos a lo que nos dedicamos
y, por tanto, tenemos
que estar todo el santo día dándole
que te pego a lo mismo. El caso
es que en buena parte de los trayectos
que hago dentro del coche
por la ciudad, en un instante determinado,
recurro a las emisoras
enteramente musicales. Y he descubierto
en los últimos tiempos
una de este tipo que cuenta con
una selección de melodías, de las
mejores que pueden sintonizarse
para mi gusto. Se trata de ese
apartado del dial que Onda Cero
ha dejado para estos menesteres.
Sólo tiene un inconveniente. Y es
que siempre que me refugio en
ella para relajarme de
lo mío, pero es que siempre –da igual de la
hora que estemos hablando–,
me entra la canción francesa titulada
«Je t´aime». Sí, es esa, que
seguro que habrán escuchado en más de
una ocasión, compuesta mitad en
plan susurros haciéndote llegar
una señora lo mucho que te quiere,
pero en francés, y mitad jadeos.
Y, claro, huyo de las programaciones
convencionales para no
ponerme malo y, en donde voy a
refugiarme, me pongo peor. Porque,
además, es que no hay derecho.
Cuando uno andaba por
los dieciocho años no salía en estos
días de «La túnica sagrada» y,
ahora que no los tiene pero que
tampoco se ha convertido en estatua
de sal, le saltan con jadeo va,
jadeo viene. La historia de la humanidad
es jodida pero, en fin,
joder por joder de esa manera, y
sabiendo además cómo está el
tráfico en estos días, no es cristiano.
El otro día venía mi hijo
cuando ocurrió y, como llevaba
mucho acumulado, con qué expresión
no me vería que me dijo:
«Papá, ¿te pongo las noticias?».

9 de noviembre de 2007

Ya en casa


Dos semanas después, los tres tripulantes españoles involucrados en el escándalo de la ONG francesa «El Arca de Zoé» han aterrizado en Madrid. En casa. Después de tanta incertidumbre, noticias, rumores, sospechas... Y también indignación. Mucha indignación. Más aún al ver el video en el que se aprecia cómo vendan a unos niños sanos, cómo les enseñan a esconderse en el autobús para no ser descubiertos...

Pero al fin todo ha salido bien para los españoles que se han visto envueltos en esta turbia historia.

La diplomacia (francesa y española, en orden premeditado) ha sido fundamental para que esta pesadilla termine. Para ellos, para sus familias. Y sobre todo, y fundamental, para más de un centenar de niños, indefensos y demasiado inocentes, que continuarán en su tierra, con su familia.

Ahora, la noticia es que el Gobierno español ha ofrecido a las autoridades chadianas un programa educativo para los niños implicados. Ésta es la primera «aportación» de las muchas que deberán abonar España a Chad. Los favores se pagan. Y, en estos países, el kilo está caro.

8 de noviembre de 2007

Estos fachas...

Así es como ha calificado hoy el alcalde de San Sebastián, Odón Elorza, a los concejales del Partido Popular durante la celebración de un pleno local...

Eso sí, el micrófono le traicionó. Éste permaneció encendido y las palabras del socialista se escucharon más allá de donde él hubiera deseado. O no.



Y añado yo: «Estos demócratas...».

«El Mundo», a la venta


Llegó el momento. El último Premio Planeta ya está a la venta. El gran Juan José Millás ya tiene en las librerías su última obra, «El Mundo». Como bien dice él:

Hay libros que forman parte de un plan y libros que, al modo del automóvil que se salta un semáforo, se cruzan violentamente en tu existencia. Éste es de los que se saltan el semáforo. Me habían encargado un reportaje sobre mí mismo, de modo que comencé a seguirme para estudiar mis hábitos. En ésas, un día me dije: «Mi padre tenía un taller de aparatos de electromedicina.» Entonces se me apareció el taller, conmigo y con mi padre dentro. Él estaba probando un bisturí eléctrico sobre un filete de vaca. De súbito, me dijo: «Fíjate, Juanjo, cauteriza la herida en el momento mismo de producirla.» Comprendí que la escritura, como el bisturí de mi padre, cicatrizaba las heridas en el instante de abrirlas e intuí por qué era escritor. No fui capaz de hacer el reportaje: acababa de ser arrollado por una novela.

Villanueva, el personaje del día

Sí, del día y poco más. Este tipo de personajes ansían protagonismo y la ausencia de éste les irrita. Qué vamos a hacer.

El citado ex docente ha venido a clase para, en principio, presentarnos unas jornadas sobre deontología que imparte en Orihuela. Digo en principio porque de facto ha hablado de todo menos del curso en cuestión.

No entiendo cómo personas preparadas, con amplio reconocimiento entre la comunidad universitaria... pueden permitirse la licencia de acudir a un aula y adoctrinar. Sí, adoctrinar. Éste ha sido el único fin de su extensa charla. Interminable seguramente.

Para empezar no me gustan las personas que antes, incluso, de saludar abogan por la libertad y la democracia. Ya sabes: «dime de qué presumes y...». Y si además su carta de presentación es una descalificación, improcedente, a un medio de comunicación menos aún. Pero ahí no se quedan las cosas, claro.

Su aleccionamiento sobre quiénes son los malos en la prensa y quiénes los buenos podríamos tildarlo de surrealista. A este último grupo pertenece el actual medio que le da voz. Casualidades, no vayamos a pensar mal.

Descalificar, cobardamente -por su boca no ha salido ni un nombre propio- al director de un medio de comunicación alicantino, tachándolo de «cretino»; infravalorar su capacidad de dirección por no poseer la licenciatura de Periodismo... Sin embargo, lo más gracioso es que durante su presentación ha repetido en varias ocasiones que lleva decenas de años ejerciendo el periodismo... O sea, él sí, el resto no. Llamativo cuanto menos.

Y así, minutos y minutos... El insulto, la descalificación y la falta de respeto como única arma para criticar, para defender una opinión sesgada, partidista.

Sus ideas políticas son respetables. Ahora, su escasa educación y consideración, no. Una lástima que tanta inteligencia quede enturbiada por dosis extremas de altanería.

Una persona así imparte un curso sobre deontología y ética... Que le vaya bien a todo el que ose acudir. Mis respetos y mi admiración. No debe ser tarea sencilla disfrutar durante todo un cuatrimestre de los consejos cuasi espirituales del «personaje del día».

Para los valientes el curso se titula «Deontología periodística y Medios de Comunicación», impartido por A. Villanueva y bajo el auspicio de la UMH. Nada más que añadir.

7 de noviembre de 2007

La «ñ» compite con la «z»


Cuatros años atrás descubrimos el poder de la «Z», con su eterna compañera, inseparable, la «P». Ahora se ha puesto de moda la «ñ», eso sí, con el permiso de la Omega de nuestro alfabeto.

Hoy, en El País, el maestro Forges dedica su espacio gráfico al nuevo miembro de la sociedad cibernética.

Una pequeña reflexión. Mientras la Real Academia presenta a la «ñ» en Internet, y así una forma más de defender el español en un mundo tan anglosajón, la factoria socialista amplifica un fallo de dicción de Zapatero para publicitar al futuro candidato... ¿Defendemos nuestra lengua? ¿Restamos importancia a una campaña publicitaria? ¿Debe el máximo representante nacional de cuidar esos detalles? Juan Luis Cebrián, consejero delegado del Grupo Prisa, ha optado esta semana por recriminar al presidente su iniciativa.

«Señor presidente del Gobierno, ruego explique a sus asesores que no hace falta asesinar la ortografía para ganar unas elecciones. Dejen, pues, de amedrentarnos con las zetas, y no confundan lexicográficamente al personal, ya bastante absorto ante el aluvión de nuevas palabras de bárbaro origen que inundan los medios de comunicación», concluyó el periodista «amigo personal» de Zapatero

6 de noviembre de 2007

Curiosa portada


Para comenzar, la primera de El Periódico de Catalunya. No me negaréis que es, cuanto menos, curiosa.

El titular reza: «Otro mes sin Cercanías».

Como imagen, un gran calendario de noviembre. Pero, debajo de cada fecha no aparece el santo, al menos el convencional. Cada número se apoya en un santo ¡PAGANO! Usuarios de los trenes de cercanías de Barcelona como meros mártires. Y, para terminar, el último día: un deseo. El 30 de noviembre, la fecha elegida por Fomento para que el tráfico de trenes se normalice, o eso dice Victor Morlán, secretario de Estado de Infraestructuras. Habrá que confiar en él. No queda otra.




¡Hola! ¿Hay alguien?

Y llegó el día. Mi aparente resistencia toca fin. Hace mucho tiempo que llevo pensando, pero sólo pensando, crear mi propio blog. Hoy, 6 de noviembre, me he decidido. Por fin voy a tener mi pequeño espacio cibernético.

En este rincón pretendo destacar periódicamente nuestra realidad. El periodismo, claro está, acaparará mucho terreno, pero no sólo de información, opinión… vive el hombre.
El día a día creará Desde el Matxo del Castell… Alicante es su sede, pero el exilio también contará con su protagonismo.

Aún soy bisoña en este mundo. Así que perdonen. Ahora, prometo actualizarme y poco a poco ofrecer una mejor calidad, incluso cantidad si se portan bien.

Ustedes comenten, y mucho. Aviso, aquí la censura existirá, pero con delicadeza. O no, de su comportamiento depende.

Este blog lleva por nombre un recodo, precioso, de Alicante. Allí, arriba, en Santa Bárbara, con el mar bajo los pies, está el Matxo del Castell.

I des del Matxo del Castell mires i dius: «Què encant!». No és este ja el poble vell, que és altre Alacant. Visca Alacant! Visca Alacant! Visca Alacant! Visca Alacant!